El almuerzo valenciano, conoce esta tradición

Existe una tradición en la Comunidad Valenciana solo apta para valientes. En estos tiempos de culto al cuerpo, dietas fit y cálculo de calorías, desde Valencia se reivindica el tradicional almuerzo valenciano, l’esmorzaret valencià. Además ahora más que nunca, ya que parece que hay un revival ochentero, y por la popularidad de algunas cuentas en redes sociales.

El almuerzo valenciano es esa comida que se sitúa entre el desayuno y la comida (la del mediodía). Básicamente es el antecedente del brunch, pero mucho más potente. La tradición procede de las jornadas laborales que comenzaban al alba. A media mañana se hacía una pausa para comer algo y «recargar las pilas». Aquí hay tantos casos como trabajadores, ya que había quien se llevaba un bocadillo de casa y pagaba la bebida en un bar donde se tomaba un descanso; quien compraba los ingredientes en el mercado y en el bar le preparaban el bocata; quien todo lo adquiría en el bar…

LO QUE NO DEBE FALTAR EN EL ALMUERZO VALENCIANO

Si algo debe incluir todo almuerzo valenciano son los siguientes componentes:

Bocadillo

Un almuerzo valenciano sin bocadillo, ni es almuerzo ni es nada. Pero un buen bocadillo. Grande, que primero entre por los ojos y que sacie el hambre para lo que resta de mañana hasta la hora de la comida. Como mínimo debe necesitar media barra de pan. Por debajo no se considera ni bocadillo, si no un triste montadito.

Bebida

La reina de las bebidas es la cerveza. Si hay un grupo compartiendo el almuerzo se suele pedir una litrona para todos (o varias). Otra variante es el vino con gaseosa. Evidentemente si no se puede consumir alcohol se sustituyen por refrescos o incluso agua.

Aperitivos

El gran clásico son los cacahuetes. A ser posible de la variedad “de collaret» (de collarcito) que se cultiva en tierras valencianas y que es muy apreciado. También se puede acompañar el almuerzo con olivas partidas, altramuces, y encurtidos como guindillas, cebolletas, etc.

Cremaet, con su característica presentación. FOTO: Wikimedia Commons

Café

Como quien consume un almuerzo valenciano suele haber madrugado, el café es casi imprescindible. El más demandado es un cremaet (quemadito). Es una variante del carajillo donde el licor, generalmente ron, se quema en el mismo vaso (de ahí el nombre) para hacerlo más sabroso y eliminar parte del alcohol. En algunas comarcas utilizan vasos de barro que aguantan mejor la temperatura. Se le añaden un par de granos de café, canela en rama, azúcar y piel de limón. Un buen cremaet, a la hora de ser servido, debe de diferenciar el licor y el café.

Compañía

Decía Gabriel García Márquez que “ningún lugar en la vida es más triste que una cama vacía”. Pero almorzar en una mesa vacía no es precisamente una fiesta. El almuerzo valenciano no es simplemente un acto de nutrición. Es, ante todo, un acto social. Hay que almorzar en compañía.

LOS BOCADILLOS DEL ALMUERZO

¡Marchando una brascada! FOTO: Wikipedia

Aunque ya he ido desgranando algunos aspectos de cada uno de los elementos que componen el almuerzo valenciano, conviene detenerse y ahondar en los bocadillos. Una muestra más de la riqueza de la gastronomía valenciana, como ya tratamos en dos ocasiones con sendos posts, uno dedicado a los arroces, y otro al resto de platos que se elaboran en estas tierras. Respecto a los bocadillos en Valencia algunos tienen nombre propio. Entre los más destacados se encuentran los siguientes:

Chivito

Bocadillo compuesto de rodajas de lomo fresco a la plancha, bacon, tomate, queso, lechuga, queso, huevo frito (o a la plancha) y mayonesa.

Brascada

Un gran clásico cuyos ingredientes son: filete de ternera (depende del tamaño del bocata, incluso dos), jamón serrano y cebolla frita. Además se suele restregar un diente de ajo por el pan para impregnar el aroma.

Almussafes

Este bocadillo, que toma su nombre de un municipio al sur de la capital valenciana lleva sobrasada, queso y cebolla frita o caramelizada. Además se pasa por la plancha para derretir tanto el queso como la sobrasada y que suelten un poco de grasa. Un bocadillo inigualable.

Además los bares suelen tener un buen surtido de otros bocadillos clásicos como:

Blanco y negro

Un bocadillo que lleva longaniza (salchicha blanca) y morcilla

Sepia con mayonesa

Poco más que explicar. La sepia puede estar hecha a la plancha o rebozada. También se admite el allioli en vez de la mayonesa.

Pepito de ternera

El bocadillo más clásico, un filete de ternera entre pan.

Tortilla

¡La imaginación al poder! De patatas, paisana, de habas, alcachofas, con atún, con taquitos de jamón serrano…

El bocadillo suele estar acompañado de tomate rallado o en rodajas, ajos tiernos a la plancha o habas fritas, dependiendo de la temporada. Ya he dicho que la contundencia de los bocadillos es clave. Bares para almorzar hay muchísimos que ofrecen un servicio y, sobre todo, un producto mucho más que dignos.

EL CACAU D’OR

Premios Cacau d’Or. FOTO: hortanoticias.com

Para querer distinguir a esos bares donde el almuerzo valenciano es una celebración de vida se creó el premio Cacau d’or. Liderado por el periodista valenciano Paco Alonso, en 2021 se ha celebrado la sexta edición de estos premios que conjugan el reconocimiento tanto a locales que continúan con la tradición, como a aquellos que incorporan elementos de innovación en un acto que parece tan dogmático. No nos engañemos, en ocasiones los valencianos somos muy nuestros con nuestras cosas, la prueba más palpable es la que ya se ha denominado “policía de la paella», que lapida cualquier elemento que se salga de la ortodoxia paellil. Ojo, no critico, que soy el primero que hay cosas que hacen con la paella, por ejemplo, que consiguen que los ojos se me vuelvan en las órbitas. Pero hay que ser honesto con nosotros mismos y asumirlo.

Suele ser habitual que en los polígonos industriales encontremos también bares donde consumir almuerzos pantagruélicos. También de la mano de Paco Alonso se puso en marcha la web La Cultura del Almuerzo, donde se encuentra un más que interesante mapa donde se encuentran un montón de bares y restaurantes, categorizados por tipo, localización, etc. Su uso es muy fácil y absolutamente recomendable (por lo delicioso).

Almorzar en Benidorm

He decir que me sorprende no encontrar ningún bar en Benidorm en el mapa de La Cultura del Almuerzo, habiendo varios que tienen una gran fama para almorzar. Voy a citar solo dos que considero imprescindibles.

En primer lugar El Beato. Se encuentra en la calle de La Palma, en pleno centro de Benidorm, en el barrio del Calvari. Un bar no muy grande pero especializado en almuerzos en el que encontraréis unos bocadillos geniales y un trato magnífico. El segundo establecimiento es el bar del Trinquet, es decir, el lugar donde se juega a pelota valenciana. Se encuentra en las afueras, en el límite con el término municipal de Alfaz del Pi, junto a la Ermita de Sanz. Un templo de los almuerzos.

Ahora solo queda que, si no conoces esta arraigada costumbre valenciana la pruebes y practiques. Cada vez se conoce más el almuerzo valenciano fuera de nuestro ámbito gracias, como he dicho anteriormente, a las redes sociales y a los medios de comunicación especializados en gastronomía. Una tradición muy social y que se adapta a cada comensal.

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